La historia del Calendario de Adviento se remonta a finales del siglo XIX en Alemania. Cuentan que una mamá alemana, que era pastelera, le hizo a su hijo un bizcocho que partió en pedazos para que pudiera comer un trozo cada día hasta el día de Navidad, el 25 de diciembre.
En el siglo XX, Gerhanrd Land, un ciudadano de Munich fabricó el primer Calendario de Adviento, con ventanas y cromos. Hoy en día, tras las ventanas solemos encontrar figuras de chocolate para los más pequeños. El calendario con chocolates dentro se empezó a fabricar en 1958.
En este Calendario de Adviento, podéis repasar los valores que nos enseña Jesús de una manera sencilla y entretenida.
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